miércoles, 20 de abril de 2016

A U T O R R E T R A T O

Como diría la gran Frida Kahlo, "Nunca pinto sueños o pesadillas. Pinto mi propia realidad."
Hoy me tomo la libertad de aplicarme esa gran frase suya. Cuando pinto, bien sea con lápices, con mis queridos pinceles o recientemente con mi tableta gráfica; nunca pienso en agradar, no pienso en pintar lo que soñé, ni lo que otros me han contado. Pinto mi versión de todo: de la naturaleza, de la vida, del mar... (El mar siempre me ha fascinado, es mi gran amor).

Un día decidí pintarme, ¡qué tarea tan difícil! ¿Cómo expresar tantas cosas, tantos sentimientos y vida interior? Cogí la tableta, y me puse manos a la obra. Ese día salieron trazos simples. Salió gris y pincel gordo. Trazos imperfectos e inacabados. ¿Cómo si no iba a contar lo que soy, qué en este momento soy solo un "proyecto de"? proyecto de persona, de publicista, de pintora, de escritora...


Poniendo otra vez en mi boca palabras de Frida:
«Me pinto a mí misma, porque soy a quien mejor conozco».